Consejos

Las drogas producen, al ingerirlas un efecto placentero. Ese efecto placentero hace que sea muy atractivo volver a tomarlas. El consumo continuado conlleva consigo el riesgo de convertirse en hábito o adicción: deja de ser una decisión el consumir para pasar a ser una necesidad, una dependencia. Es importante que mantengas espacios de relación y formas de divertirte alternativas a ir siempre colocado.

Una vez que empiezas a realizar un consumo continuado, la dosis habitual no te hace el mismo efecto que antes, Es el momento de dejar de consumir y plantearse una abstinencia. Lo que ocurre es que el cuerpo se ha acostumbrado a la sustancia y necesitas más cantidad para el mismo efecto (tolerancia). Incrementar la dosis significará siempre un mayor riesgo.

Deja un comentario